Terrórigen: El Demonio Nacido de la Tierra
Origen
Terrórigen no nació del fuego infernal ni de las sombras etéreas. Su existencia se remonta a la formación misma de la Tierra. Forjado en el corazón del planeta, durante la violenta colisión de asteroides y la formación de los primeros continentes, Terrórigen es una encarnación de la energía geológica primordial. No es un demonio invocado o creado, sino una entidad surgida de la propia materia terrestre, un ser vivo hecho de roca fundida, magma y energía telúrica.
Linaje
Su linaje es único, sin precedentes en el infierno o en cualquier plano existente. No tiene progenitores demoníacos, ángeles caídos, ni siquiera un dios oscuro como creador. Es un ser auto-generado, el resultado directo de la energía planetaria en su forma más brutal y concentrada. Su esencia se conecta intrínsecamente con la Tierra, capaz de sentir cada temblor, cada erupción, cada desplazamiento tectónico como si fueran parte de su propio cuerpo.
Dominio
Terrórigen ejerce dominio sobre la geokinesis, manipulando la tierra, las rocas, el magma y las fuerzas tectónicas a su voluntad. Puede causar terremotos devastadores, abrir grietas en la tierra que tragan ejércitos enteros, y liberar ríos de lava fundida que arrasan todo a su paso. Su presencia altera el campo magnético terrestre, causando tormentas geomagnéticas y fallas en la tecnología.
Habilidades
Además de su control sobre la geokinesis, Terrórigen posee una resistencia sobrehumana, siendo prácticamente invulnerable a las armas convencionales. Puede regenerar heridas de forma asombrosa, incluso aquellas causadas por magia o armas divinas. Su fuerza física es capaz de destruir montañas y su rugido puede provocar avalanchas.
Grandes Acontecimientos
- La Gran Fractura (Año 1200 a.C.): Terrórigen despertó por primera vez, causando un cataclismo que dividió un continente en dos, dando forma a un nuevo océano y provocando la destrucción de antiguas civilizaciones.
- La Guerra de las Cenizas (Año 500 d.C.): Un ejército intentó conquistarlo, pero Terrórigen respondió con erupciones volcánicas y terremotos que arrasaron a los invasores, dejando tras de sí un campo de ceniza y muerte.
- El Silencio de Piedra (Año 1850): Tras un milenio de aparente inactividad, Terrórigen se manifestó de forma sutil, causando una serie de inusuales fenómenos geológicos que los científicos no pudieron explicar, dejando una sensación de amenaza latente y un misterio sin resolver.